El autor, primeramente ofrece un servicio a los exorcistas y a los sacerdotes. Así como cada médico debe estar capacitado para indicar a sus pacientes cuál es el especialista que necesita consultar (otorrino, ortopédico, neurólogo), cada sacerdote debe tener discernimiento para saber si una persona necesita o no dirigirse a un exorcista. La existencia de los demonios, la posibilidad de las posesiones diabólicas, el poder de Cristo para expulsar demonios por parte de los que crean en el mensaje evangélico son verdades reveladas, claramente contenidas en la Biblia, profundizadas por la teología y constantemente enseñadas por el magisterio de la Iglesia. El Padre Gabriel Amorth tiene el ministerio de exorcista que el Card. Ugo Poletti, Vicario del Papa en la diócesis de Roma le confirió. Pone a disposición de todos los interesados el fruto de su experiencia sobre el tema, y las experiencias de otros sacerdotes.
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